4 Para que Yahveh cumpla la promesa que me hizo diciendo: “Si tus
hijos guardan su camino para andar en mi presencia con fidelidad, con todo
su corazón y toda su alma, ninguno de los tuyos será arrancado de sobre el
trono de Israel.”
5 También sabes lo que me hizo Joab, hijo de Sarvia, lo que hizo a los
dos jefes de los ejércitos de Israel: a Abner, hijo de Ner, y a Amasá, hijo de
Yéter, que los mató y derramó en la paz sangre de guerra; ha puesto sangre
inocente en el cinturón de mi cintura y en la sandalia de mis pies.
6 Harás según tu prudencia y no dejarás bajar en paz sus canas al seol.